Estaba claro, Don Francisco de Goya nunca tuvo un pelo de tonto, de ahí que haya premiado a Blancanieves y a Tadeo Jones.
Merecidísimos premios.
¿Las habéis visto ya? ¿Qué os han parecido?
Elefante corazón de pájaro, una entrañable historia, fácil de leer y encantadora. Ah, y con unas estupendas ilustraciones de Emilio Urberuaga (al que ya conocéis de Manolito Gafotas), de hecho, la última ilustración del libro la tiene la autora y le encanta, porque ella también es una elefanta con corazón de pájaro, y no lo digo yo, que lo dice ella.
La bruja y el maestro, una divertidísima vuelta de tuerca a las historias de brujas, cuya protagonista, que debería perseguir, cazar y exterminar a los niños, no da pie con bola y los hechizos se vuelven contra los maestros, una crítica a los profes sin chispa. Y un final muy propio de San Valentín. Lo ilustra Asun Balzola, de la que ya os hablaré en otra entrada.
Hazel se ve obligada a separarse de todo su mundo, de sus amigos y de su novio justo el verano de su último año de instituto, el que debería haber sido el mejor de su vida. Se ve obligada a trasladarse a un pueblo perdido donde no conoce a nadie y donde no parece existir ningún tipo de entretenimiento. Todo apunta a que este va a ser el verano más aburrido de su vida. Pero las cosas no siempre son lo que parecen... Envuelta en la aventura más fantástica que hubiera podido soñar, Hazel tiene que ayudar al chico más desconcertante e irresistible de dos mundos y enfrentarse a las engañosas criaturas del Otro Lado en una carrera contrarreloj para salvar a su familia, a sus amigos y a toda la especie humana.